No sabemos bien porque, no sabemos que
extrañas coincidencias hicieron que todo esto pasara, no sabemos que
hubiera sido si hubiéramos dejado mas tiempo sin vernos, no sabemos
que hubiera pasado si aquello hubiera sido solo un encuentro casual,
no sabemos...
Fue un punto sin retorno del que no me
arrepiento. Fue una época que me ata a mi ultimo recuerdo vivaz y
hermoso de mi tormentosa adolescencia y el principio de mi fresca
juventud, fue la chispa que inicio con un renacer artístico que vino
acompañado de tu mano, tu mano, cuantas veces no soñé con tu mano
tocando una vez más mi mano, cuantas veces no desperté de ese sueño
para volver a la realidad; fue también el inicio de una promesa, de
un pacto para vivir, de un caramelo, de vuelos, de muchas otras cosas
que aun siguen intactas dentro de mi.
Es ahora una realidad tan próxima que
ya puedo oler el invierno, es una verdad ahora tan esperada, es un
encuentro, quizá un adios... o quizá no, es levantarse todos los
días con hastío a trabajar, con hastío a estudiar y de repente
pensar “nos falta ya muy poco” y comenzar a sonreír motivarse y
olvidarse de las cosas malas, es un vuelo a las 4 am de abril del
próximo año, son colores, son llamadas perdidas de mi corazón, son barriletes, es
irse p'al norte gracias a la
vida de las violetas, es Nicanor, es Neftali, es la Mistral, es
Huidobro, es burlarse de Piñera, es Victor Jara, es Pinocho muerto,
es como pensar que Isla Negra será nuestra, es como una dulce
despedida y final.
Tanto amor, tanto
querer, todo eso hicieron tus manos en mi, creo que es hora de que yo también les haga justa recompensa y, con mis manos, devolver esas
caricias al corazón y la razón
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